El 23 de septiembre de 2020 marcó un hito para los usuarios de Internet con discapacidad, ya que era la fecha límite para la aplicación de la Directiva sobre la accesibilidad a la red, por parte del sector público, en toda la Unión Europea.
El objetivo es hacer que los sitios web sean accesibles para las personas discapacitadas y de edad avanzada, de acuerdo con normas armonizadas a nivel europeo. Los nuevos requisitos deberían permitir navegar con facilidad por los sitios web de los organismos públicos, presentar formularios, hacer pedidos online o utilizar aplicaciones que se adapten a sus necesidades y que puedan utilizar diferentes tecnologías de asistencia.
La Directiva exige que los sitios web y las aplicaciones que entran en el ámbito del texto sean más accesibles, haciéndolos perceptibles y comprensibles. Esto incluye información textual y no textual, documentos descargables, procesamiento de formularios digitales y la realización de procesos de autenticación, identificación y pago. También exige que los Estados miembros vigilen e informen periódicamente sobre los sitios web del sector público y sus aplicaciones móviles.
El ámbito de aplicación de la Directiva incluye a las organizaciones financiadas públicamente en el sector cultural. Sin embargo, es probable que la Directiva tenga un impacto limitado en el sector de las artes en vivo, ya que hay excepciones dedicadas a dichas organizaciones.
A pesar de que parte de las normas no tendrán que ser seguidas por el sector de las artes en vivo, los sitios web de organizaciones culturales y creativas podrían necesitar una actualización de fácil acceso, para cumplir con la Directiva. Algunas de las partes de los sitios web afectados podrían ser: la información general de texto e imágenes publicadas, materiales de audio y audiovisual y servicios de venta de entradas online. Por último, también podría exigirse a organizaciones del sector público de las artes en vivo que proporcionen una declaración de accesibilidad para mostrar el cumplimiento de la Directiva.