El objetivo del Reglamento sobre envases y residuos de envases es hacer frente al aumento de los residuos de envases generados en la UE, armonizando al mismo tiempo el mercado interior de envases e impulsando la economía circular.
Más concretamente, esto significa
– Requisitos de sostenibilidad y contenido reciclado en los envases, como la restricción del mercado de envases en contacto con alimentos que contengan PFAS.
– Objetivos de reutilización para 2030 y obligaciones de rellenado, como para los negocios de comida para llevar que permiten a la gente traer sus propios envases.
– Sistemas de devolución de depósitos (SDDR): para 2029, los Estados miembros deben garantizar la recogida selectiva de al menos el 90% anual de las botellas de plástico de un solo uso y los envases metálicos de bebidas.
– Restricciones a determinados formatos de envases, como los de plástico de un solo uso para frutas y verduras, para alimentos y bebidas y para otros productos.